lunes, 27 de abril de 2020

Abrieron indagación relacionada al Covid-19 contra la alcaldesa de Bogotá

Claudia López, alcaldesa de Bogotá, Colombia. / AFP

La Fiscalía de Colombia inició una indagación contra la alcaldesa de bogotá, Claudia López, por presunta violación de las medidas sanitarias impuestas por el Gobierno de Iván Duque para contener la propagación del Covid-19.
lapatilla.com
A continuación el comunicado íntegro de la Fiscalía colombiana:
La Fiscalía General de la Nación, en el marco de sus funciones constitucionales y legales, continúa su labor contra quienes desacatan las medidas de protección dispuestas por el Gobierno Nacional para prevenir la propagación del Covid -19 (coronavirus).
En ese sentido, fue abierta indagación contra la alcaldesa de Bogotá, Claudia Nayibe López Hernández, por presunta violación de medida sanitaria (artículo 368 del Código Penal). Un fiscal seccional, con el apoyo de un equipo de investigadores del CTI, recopilará y analizará el material probatorio que permita verificar la posible responsabilidad de la funcionaria.
El Decreto 531 del 8 de abril de 2020, expedido por el Gobierno Nacional “por el cual se imparten instrucciones en virtud de la emergencia sanitaria generada por la pandemia del Coronavirus Covid-19, y el mantenimiento del orden público”, señaló en el parágrafo 2 del artículo 3, que se permitirá la circulación de una sola persona por núcleo familiar para realizar actividades como adquisición de bienes de primera necesidad -alimentos, bebidas, medicamentos, dispositivos médicos, aseo, limpieza, y mercancías de ordinario consumo en la población-.
Esta norma fue acogida por la Administración de Bogotá en el Decreto 106 del 8 de abril de 2020 que, en el parágrafo 2 del artículo 2, tomó al pie de la letra las condiciones para movilizarse durante el aislamiento preventivo obligatorio.
Es deber de todos los servidores acoger y cumplir las disposiciones que buscan proteger a la población de los efectos de la pandemia Covid-19 y, en el ejercicio de sus labores, ser ejemplo ante la comunidad del estricto acatamiento de las medidas sanitarias.
La Fiscalía General de la Nación hace pública esta información por razones de interés general. 
General de la Nación abrió indagación contra la alcaldesa
de Bogotá, Claudia Nayibe López Hernández, por presunta
violación de medida sanitaria (artículo 368 del Código Penal).
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Colombia reabrió gradualmente la economía en medio de las dudas

Trabajadores y ciudadanos se aglomeran este lunes en las calles luego de concederse un decreto que permite, entre otras cosas, el regreso a las labores para el sector de la construcción durante la pandemia. Foto: EFE/ Mauricio Dueñas Castañeda, BOGOTÁ (COLOMBIA), 27/04/2020.

Miles de trabajadores colombianos de los sectores de la construcción y las manufacturas empezaron a volver este lunes a sus labores en una confusa jornada debido a la oposición de algunos alcaldes a la controvertida flexibilización de la cuarentena por el coronavirus autorizada por el Gobierno.
La retomada gradual de la actividad económica beneficiará a unos cuatro millones de personas que viven de esos dos sectores, según el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), pero ha chocado con la posición de alcaldes como la de Bogotá, Claudia López, que es partidaria de no aflojar el aislamiento social, al menos hasta el 11 de mayo, cuando termina la cuarentena.
Hasta el momento hay 5.379 casos confirmados de COVID-19 en el país y 244 fallecidos, y López y otros alcaldes consideran que empezar a abrir la economía puede disparar los contagios, mientras que el Gobierno defiende la flexibilización controlada de la cuarentena, que empezó el 25 de marzo, para aliviar la situación económica de empresas y trabajadores.
Con esa discusión de por medio el Gobierno expidió anoche el conjunto de normas de bioseguridad que deben seguir las empresas constructoras y de manufacturas que quieran reanudar sus actividades, pero enseguida López anunció que en Bogotá hoy solo empezaría el registro de las compañías interesadas y que no habría autorización inmediata para operar.
OBREROS EN ESPERA
“No hemos trabajamos desde que se inició la cuarentena. Anoche nuestro jefe nos envió un mensaje informándonos que hoy no había trabajo y que posiblemente podíamos volver a las obras después del 4 de mayo”, dijo a Efe Pablo Gutiérrez, empleado de una constructora dedicada a edificios y vías en Bogotá.
Gutiérrez manifestó que esa incertidumbre tiene preocupados a sus compañeros que, como él, no reciben salario desde mediados de marzo, una situación que afecta a miles de obreros que incluso madrugaron este lunes para llegar a las obras a las que están asignados pero encontraron las instalaciones cerradas.
Pese a que hace una semana el presidente Iván Duque anunció que este 27 de abril se reactivarían la construcción y las manufacturas, hasta anoche los bogotanos no tenían certeza de si efectivamente se pondría en marcha en esas dos actividades por las advertencias de la alcaldesa.
BOGOTÁ PERMANECE CERRADA
“Por fortuna el presidente nos escuchó a todos los alcaldes que presentamos diferentes tipos de posturas y decidió que desde mañana seguimos en lo mismo. Mañana no va a empezar ninguna obra ni ninguna empresa”, manifestó López.
Según la Cámara de Comercio de Bogotá, las actividades manufactureras representaron el 8,5 % del PIB de la ciudad en 2019, mientras que las empresas de construcción generaron el 4,6 %.
Solo en la capital, 80.724 empresas permanecen al sector manufacturero y otras 47.885 a la industria de la construcción, cifras por las que la alcaldesa solicitó tiempo al Gobierno nacional para que las compañías puedan establecer protocolos sanitarios.
Por el momento, en Bogotá solo pueden operar negocios de artículos de primera necesidad, como supermercados o droguerías, así como restaurantes solo para ventas a domicilio y bancos, entre otros.
REAPERTURA EN OTRAS CIUDADES
Mientras tanto, en Medellín, capital del departamento de Antioquia (noroeste), los empleados de estos sectores sí pudieron retornar a sus actividades, cumpliendo estrictas medidas de bioseguridad.
Lo mismo ocurrió en la caribeña Barranquilla, capital del Atlántico, donde cerca de 80 empresas reiniciaron este lunes sus labores.
Sin embargo, en Cali, capital del Valle del Cauca (suroeste), desde este lunes las empresas deberán tramitar un “pasaporte virtual” que les permitirá paulatinamente reactivar sus labores en los próximos días.
“Estamos listos a trabajar con la Administración en esta nueva etapa, buscando apoyar los procesos para que las revisiones y aprobaciones de los protocolos se hagan de forma rigurosa y objetiva pero con la mayor agilidad posible”, aseguró en un comunicado el gerente de la Cámara Colombiana de la Construcción (Camacol), Alejandro Callejas Aristizábal.
En general, quienes pudieron retornar a sus labores hoy, lo hicieron temerosos de las consecuencias que podría tener esta medida en la propagación del coronavirus, principalmente en el transporte público que este lunes tuvo un notable aumento de usuarios en distintas ciudades.
En algunas de ellas, vendedores ambulantes aprovecharon la circulación de personas para salir de nuevo a las calles a ganarse unos pesos.
EFE

domingo, 26 de abril de 2020

Ascienden a 144 los contagiados en una cárcel del centro del país

Fotografía cedida por la Alcaldía de Villavicencio y fechada el 14 de abril de 2020, de una cámara de desinfección instalada en una de las entradas de la Cárcel de Villavicencio (Colombia). La cárcel, en el centro de Colombia, se convirtió en uno de los principales focos de COVID-19 en el país, con cerca de 100 contagiados y tres muertos, situación que la tiene al borde de una catástrofe sanitaria. En ese establecimiento fueron detectados hace dos semanas los primeros casos de coronavirus y desde entonces la cifra de contagiados no para de crecer entre reclusos y guardianes e incluso hasta un cocinero de la prisión dio positivo. EFE/ Oscar Bernal/ Alcaldía de Villavicencio

Las autoridades colombianas confirmaron este domingo que los contagiados de COVID-19 en la cárcel de Villavicencio, capital del Meta, ascendieron a 144, de los cuales tres han fallecido, informó la Gobernación de ese departamento ubicado en el centro del país.
Según la autoridad regional, la cárcel -que incluso tiene más casos confirmados que regiones enteras del país, como Nariño (92), Huila (84) y Norte de Santander (60)- tiene 144 de los 186 contagiados del Meta.
En el establecimiento carcelario fueron detectados hace dos semanas los primeros casos de coronavirus y desde entonces la cifra de contagiados no para de crecer entre reclusos y guardianes e incluso hasta un cocinero de la prisión dio positivo.
Las pésimas condiciones sanitarias y el hacinamiento de las cárceles colombianas, que en el caso de la de Villavicencio es del 97,6 %, con 1.776 presos en un espacio que solo puede albergar a 899, han favorecido la proliferación de los contagios y alarmado a las autoridades de la ciudad.
En ese sentido, el gobernador del Meta, Juan Guillermo Zuluaga, dijo en Twitter que “se hará prueba de COVID-19 a todo el personal de la cárcel de Villavicencio”.
“No saldrán personas del centro penitenciario cuyo resultado sea positivo, serán aisladas al interior de la cárcel. Además, en coordinación con la Unidad de Servicios Penitenciarios y Carcelarios (Uspec) se instalará carpa medicalizada y dotada para atender a esta población”, dijo el funcionario.
La pandemia en la cárcel sembró el pánico entre los habitantes de los barrios que la circundan: 20 de Julio, La Vainilla y Antonio Ricaurte, pues los vecinos temen que así como el coronavirus traspasó los muros y se metió en la prisión, salga y se riegue por las calles.
Por esa razón, la Alcaldía, junto con al Gobernación del Meta y el INPEC dispusieron “un plan de aislamiento al personal privado de la libertad y cuerpo de custodia de la cárcel de Villavicencio”.
Por otra parte, las autoridades colombianas confirmaron que ya hay cinco casos confirmados de COVID-19 en las cárceles La Picota, de Bogotá, así como uno en la de Leticia, capital del departamento del Amazonas; otro en Las Heliconias, en sureño Caquetá; uno en Guaduas, en Cundinamarca, y el último en La Picaleña, prisión ubicada en Ibagué, en el Tolima.
Colombia llegó a 5.142 casos confirmados de COVID-19 con los 261 contagiados informados el sábado, mientras que reportó ocho fallecimientos y las víctimas mortales ya son 233, según el Ministerio de Salud. EFE

viernes, 24 de abril de 2020

Saqueos y trapos rojos, el retrato del hambre en Colombia

Fotografía fechada el 23 de abril de 2020 que muestra a familias esperan la entrega de mercados, mientras tienen colgados trapos rojos en sus casas como forma de manifestar la necesidad de alimentos en el sur de Bogotá (Colombia). Saqueos y trapos rojos son hoy la imagen del hambre en Colombia. Desde los barrios más pobres de Bogotá hasta los pueblos más alejados del Caribe, las protestas de los desesperados por la falta de comida se repiten a diario. EFE/ Mauricio Dueñas Castañeda

Saqueos y trapos rojos son hoy la imagen del hambre en Colombia. Desde los barrios más pobres de Bogotá hasta los pueblos más alejados del Caribe, las protestas de los desesperados por la falta de comida se repiten a diario.
“Estamos que ‘pelamos’ olla porque no tenemos nada de comer”, dice a Efe Edward Ávila, un joven que vive en el barrio Arborizadora Alta, en la localidad bogotana de Ciudad Bolívar, donde lidera un bloqueo porque, según dice, siguen esperando las ayudas alimentarias que les prometieron cuando comenzó la cuarentena para contrarrestar el coronavirus, el pasado 25 de marzo.
Ciudad Bolívar es el retrato de la necesidad. Las casas de colores vivos en algunos sectores y el Transmicable, un teleférico para subir a las partes más altas de la montaña, le dan un toque de modernidad a este cinturón de miseria que marca el límite sur de Bogotá.
El paso por la principal calle del barrio, desde cuyos miradores se puede apreciar la inmensidad de la capital colombiana, está taponado con bolsas de arena y contenedores negros donde normalmente los ciudadanos depositan la basura.
En las ventanas de muchas casas ondean como banderas trapos rojos -desde toallas hasta camisetas o cortinas-, señal de que allí hay gente que necesita comida con urgencia.
El movimiento comenzó en la vecina Soacha, una localidad aledaña a Bogotá, que junta su pobreza con la de Ciudad Bolívar, y se extendió por distintas partes del país.
Una de esa casas es la de Ávila, obrero de la construcción que gana por día trabajado y en esta coyuntura teme que su situación vaya a peor con cada prórroga que hace el Gobierno de la cuarentena.
“Ya llevamos más de un mes en esto y nada que llega ninguna ayuda, no se dirigen a donde nosotros. Han llegado ayudas pero para otros barrios; dicen en el noticiero, dicen en la prensa, que ya llegó para Arborizadora Alta y es una gran mentira”, comenta el joven, que vive con sus padres, quienes dependen de lo que él gana.
Sin embargo, la Alcaldía de Bogotá dice que desde que comenzó la cuarentena y hasta este jueves, al menos 317.553 familias recibieron ayudas en dinero y que en la ciudad fueron entregados 2,2 millones de mercados, bonos alimentarios y comida caliente.
Para cumplir esta tarea, los funcionarios de la Alcaldía se multiplican por los barrios más necesitados, van vestidos con trajes de bioseguridad y máscaras protectoras. Hacen un censo y entregan a cada familia un mercado y un kit de higiene.
AYUDA COMUNITARIA Y SUPERVIVENCIA
De las 20 localidades de Bogotá, Ciudad Bolívar es la cuarta más poblada, con más de 700.000 habitantes, muchos de ellos campesinos que llegaron allí huyendo de la violencia del conflicto armado. En los últimos años se les juntaron miles de inmigrantes venezolanos que dejaron su país para escapar de la crisis.
También habitan la zona miles de colombianos que dependen de la economía informal y sobreviven sin un ingreso fijo mensual. Hoy son los más afectados por la cuarentena porque desde hace un mes no pueden salir a conseguir ni dinero ni comida.
Estos días no han sido fáciles en Ciudad Bolívar por los intentos de saqueo de camiones repartidores de comida y por las protestas, en una de las cuales, el pasado 15 de abril, tuvo que intervenir el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía para, según la alcaldesa Claudia López, evitar un robo, aunque los vecinos dicen que lo que hubo fue un abuso de la fuerza.
Un líder de esas protestas es Ramón Emilio Botero, vendedor ambulante que, al ver la necesidad de sus vecinos, se unió a otros dirigentes comunitarios para comprar alimentos y preparar un sancocho para unas 120 personas.
“Toda la comida, cada cosa de lo que estamos preparando, es del bolsillo de nosotros”, asegura, y añade: “A los ciudadanos les dicen que les van a dar ayudas, que no se preocupen (…) y a nadie le ha llegado nada”.
Mariela Caro, una ambientalista que vive en Ciudad Bolívar y que ha podido sobrevivir gracias a una huerta casera, se puso el delantal y lideró la preparación del sancocho con los pocos ingredientes que consiguieron los líderes comunitarios.
“Deberían abrir comedores comunitarios, sin tanto lío y sin tanto problema, para poder darle alimentación a la gente que lo necesita, porque hay personas que pasan con un agua de panela todo el día”, sugiere a las autoridades.
ABANDONADOS EN EL CARIBE
A tan solo 16 kilómetros de la caribeña Cartagena de Indias, meca del turismo colombiano, se vive una situación parecida en Arroyo de Piedra, un caserío donde la gente, en su mayoría afrodescendientes, está desesperada porque por la cuarentena se cerraron todas sus fuentes de trabajo.
“Acá los hombres trabajan principalmente en la construcción y las mujeres, las que no son amas de casa, trabajan en el servicio doméstico en casas de familia de Cartagena o en los conjuntos residenciales cercanos, como el de Barcelona de Indias”, dice a Efe Nora Rodríguez, líder social del pueblo.
En el mes que llevan confinados, los habitantes de Arroyo de Piedra -en donde predominan las calles de tierra, no hay alcantarillado y el servicio de luz es intermitente- solo han recibido unos kits de alimentos para los ancianos.
“Lo que da la vida es la comida y si no nos dan la comida que el Gobierno autorizó, nos están queriendo asesinar paulatinamente”, afirma a Efe el dirigente local Remberto Arzuza.
Fotografía fechada el 23 de abril de 2020 que muestra a familias esperan la entrega de mercados, mientras tienen colgados trapos rojos en sus casas como forma de manifestar la necesidad de alimentos en el sur de Bogotá (Colombia). Saqueos y trapos rojos son hoy la imagen del hambre en Colombia. Desde los barrios más pobres de Bogotá hasta los pueblos más alejados del Caribe, las protestas de los desesperados por la falta de comida se repiten a diario. EFE/ Mauricio Dueñas Castañeda

FOMENTO DEL AUTOCONSUMO
Ante la inédita situación que vive el mundo, donde el hambre podría duplicarse, según el Programa Mundial de Alimentos de la ONU, la FAO sugiere a las autoridades colombianas fomentar en el corto plazo la producción de alimentos para el autoconsumo.
“Esta puede ser una estrategia para el acceso físico a alimentos que responda a las necesidades nutricionales de la población. A su vez, expandir los programas de protección social para poder cubrir las necesidades de la población más vulnerable”, explica a Efe el representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Colombia, Alan Bojanic.
Asegura además que en el mediano plazo “se deben generar las condiciones para que los hogares puedan progresivamente reconstruir sus medios de vida y lograr reactivación económica en los territorios”.
Con él coincide el director en Colombia de la ONG Acción contra el Hambre, John Orlando, quien asegura a Efe que tuvieron que reorientar sus operaciones en el país por la “imposibilidad de muchísima gente de respetar la cuarentena, sobre todo las personas que dependen del día a día”, que sobreviven con trabajos informales.
Por ello han entregado en las últimas tres semanas en el país 2.000 kits de comida que permiten a familias de cinco personas alimentarse entre ocho y diez días.
“Si a la gente no le damos la posibilidad de quedarse en casa, y lo primordial es la comida, no van a poder mantener el aislamiento y si no mantienen el aislamiento eso tiene un efecto en los riesgos de contaminación” con el COVID-19, afirma. EFE

El relato de la mujer que fue “abusada” sexualmente por #Maluma y #PipeBueno (+Fotos)

Luego de cuatro años, Grette Durán dio una entrevista en la que narró, según ella, lo que pasó tras el beso que el cantante de reguetón le dio en un concierto.
Aunque en las primeras declaraciones sobre lo sucedido, en 2016, la presentadora y modelo aseguró en varios reconocidos programas mexicanos que su supuesto encuentro sexual con Maluma en Cancún fue de mutuo acuerdo y hasta lo repetiría, enseguida hubo un tema con abogados y ahora dice que no disfrutó nada, pues la obligaron.
“Fue algo maravilloso, una noche superlinda. Tuve intimidad con él [Maluma], pero fue algo entre los dos”, dijo Durán, feliz, en ‘Al rojo vivo’ de Telemundo, en 2016; y “sí, estaría con él otra vez. Es un papacito”, agregó en ‘Ventaneando’ de TV Azteca, el mismo año, confirmando además esta afirmación de quien la entrevisto: que el cantante “como hombre, la llenó en todos los sentidos”.
Sin embargo, la mujer luego cambió de opinión y en recientes declaraciones que entregó al periodista ‘Gabo’ Cuevas contó que, aunque “estaba un poco tomada”, recuerda que lo del trío no fue pactado. Adicionalmente, aseveró que tiempo después hubo amenazas en su contra para que se quedara callada.
Todo empezó cuando, de acuerdo con Durán, un miembro de la seguridad de Maluma le dijo que después del concierto, en el que el artista le dio un beso en la boca, la invitarían a la suite del intérprete.
“Llegué, él [Maluma] estaba sentado, en bata, y estaba Pipe Bueno. Empezamos a platicar y a tomar. […] Tuve relaciones con Maluma y ya después salimos a la sala. Estábamos juntos, se vino Pipe y, entonces, como que él [Maluma] me dijo: ‘Ay, sí, vamos a estar con Pipe’. Yo no quería y le dije todo el tiempo que no. Estaba seducida e ilusionada con él, no con Pipe. Entonces, obviamente, él me obligó a estar con Pipe, porque yo siempre dije que no”, relató Durán en la conversación publicada este mes, y continuó:
“La verdad, estaba un poco tomada y no sabía exactamente bien lo que hacía; no me sentí bien, me sentí usada, utilizada y, literal, decepcionada de todo, porque nunca esperé eso de él [de Maluma], que él me fuera a incitar, a obligar, a decirme de que estuviéramos con Pipe. En ese momento, yo no estaba consciente, porque estaba enfocada en él, entonces era él el que estaba haciéndome cosas. ¿Lo disfruté? No, para nada, fue horrible, y no es justo que por ser mujer seamos siempre juzgadas”.
A esa versión le dio credibilidad el periodista que la entrevistó, pues ‘Gabo’ Cuevas señaló que son amigos y catalogó el caso como “una historia de terror”. “Tú, como público, tienes derecho a creer o no en este testimonio, y yo, como amigo, apoyo a esa mujer que tuvo el valor de pararse en frente de una cámara y decir: ‘Esto es lo que viví’, declaró él en el video con la presentadora y modelo, publicado en su canal de YouTube, con mil suscriptores, y que dejamos al final de esta nota.
Sin embargo, colegas suyos en México, donde pasó lo de Maluma, han cuestionado esa versión. Entre ellos, la presentadora Ana María Alvarado, que en un reciente programa de Radio Fórmula sacó a relucir otros escándalos que ha protagonizado Durán con figuras públicas.
“A esta chica le gusta relacionarse con famosos para luego hablar mal de ellos”, fue lo primero que afirmó Alvarado, que tiene más de 461 mil seguidores en su cuenta certificada de Twitter, y luego dio paso a contrastar las viejas y nuevas versiones de Durán sobre el cantante colombiano, para más adelante referirse a otros dos escándalos de ella.
“También anduvo con un futbolista famoso en su época”, y después terminaron en un pleito, y “estuvo relacionada con [el artista] Julián Figueroa, cuando la novia de él estaba embarazada”, recordó Alvarado, mostrando declaraciones de Durán, en su momento, sobre esas dos polémicas. De la segunda, manifestó que estaba soltera y podía salir con quien quisiera, pero que “no sabía que la novia de Julián estaba embarazada” y, aunque luego se enteró, solo le preguntó a él la noche después de que salieron. Mientras que de la primera negó que quisiera armar escándalo con el jugador para ganar fama.
“Si quisiera supuestamente haberme hecho famosa, pues ahí está Maluma, que sí es realmente famoso. El día que quiera ser famosa, me agarro a un famoso de verdad”, fue lo que expresó.
Al oír todo ese resumen de controversias, una compañera de programa de Alvarado, Maxine Woodside comentó: “Ella puede andar con todos los que quiera, pero primero opina una cosa y luego otra; le encanta la televisión y las luces”.

¡Tremendo lío! Periodista español hacía su reporte y transmitió en vivo su infidelidad (VIDEO)

Periodista español transmite en vivo su infidelidad / Foto: Captura de video de Youtube


Durante su reporte en vivo por Youtube, sobre el desempeño del gobierno español frente a la pandemia, el periodista Alfonso Merlos quedó en evidencia como infiel: un mujer en ropa interior, y no precisamente su novia, camina en la parte de atrás de la sala de su casa.
Por: BluRadio
Merlos trabaja para un espacio informativo digital llamado ‘Estado de alarma’, que ha sido crítico de las medidas oficiales sobre la pandemia.
También es el novio de Marta López, exconcursante de Gran Hermano.
Ella, precisamente, ha comentado a algunos medios españoles, en medio de su frustración que “sabe perfectamente quién es” la mujer que se ve pasar por detrás del periodista, semidesnuda.
Para leer la nota completa, pulse aquí.

jueves, 23 de abril de 2020

Una pantalla gigante lleva el cine a calles de Bogotá en medio de la cuarentena

Gente mira una película que se exhibe en la calle, desde el balcón de su apartamento, en medio del brote de la enfermedad por coronavirus (COVID-19) en Bogotá, Colombia. 22 de abril de 2020. REUTERS/Luisa Gonzalez

No fueron necesarios los boletos, no hubo filas para ingresar ni para comprar palomitas de maíz, antes del comienzo de la película los asistentes, animados por policías, bailaron desde sus balcones zumba, merengue y música popular colombiana.
Los espectadores dijeron que fue una función inolvidable.
Una pantalla gigante de Cine Colombia, la principal empresa de exhibición del país sudamericano, comenzó a recorrer esta semana conjuntos de edificios de apartamentos del oeste de Bogotá para proyectar desde la calle una película y contribuir a romper la monotonía de la cuarentena decretada por el Gobierno para frenar la propagación del coronavirus.
Los habitantes pueden disfrutar al anochecer el filme desde la comodidad de sus balcones.
La iniciativa es una réplica a nivel urbano de Ruta 90, un programa social que Cine Colombia lanzó en 2017 para llevar el séptimo arte a apartados pueblos del país azotados por la violencia y la pobreza.
Ruta 90 ha llevado, por trocha y ríos, la magia del cine a 265 pueblos con habitantes que nunca habían visto una proyección cinematográfica.
“La Ruta 90 de Cine Colombia se reinventó y ahora está dando cine desde las calles a los balcones en Bogotá”, dijo a Reuters Nicolás Suárez, gerente del proyecto.
Un camión transporta 2,5 toneladas de equipo que incluye una planta de generación de energía, un proyector, una consola y amplificadores de sonido, una pantalla inflable de polímero reflectivo de nueve metros de ancho por siete de alto que se instala en la calle para proyectar “Mia y el león blanco”.
Aunque a diferencia del cine tradicional, las luces no se apagan, todos alrededor de la pantalla gigante pueden ver y escuchar la película sin ninguna dificultad.
“Me parece una actividad interesante, buena, productiva en aras de la salud mental y del esparcimiento en medio del confinamiento”, dijo Edgar Guayazan, un empleado de 47 años de una entidad estatal, mientras se preparaba para la función con su esposa y su pequeña hija.
La pantalla gigante continuará llevando entretenimiento a varios sectores de Bogotá en medio de la cuarentena ordenada por el Gobierno desde el 24 de marzo a la media noche para controlar la expansión del COVID-19, que ya ha dejado más de 4.000 personas contagiadas y 206 muertos en el país.
Integrantes de la Policía Nacional apoyan cada jornada de exhibición cinematográfica animando con música a los residentes para que salgan a sus balcones a disfrutar la película.
“Muy emotivo, ayuda a que los residentes salgan de la rutina, a que se distraigan porque el confinamiento es abrumador”, dijo Mónica Martínez, una publicista a quien la policía le celebró con música su cumpleaños 29 en medio de la cuarentena antes del comienzo de la película.
Reuters