lunes, 21 de julio de 2014

La cifra de homicidios en Colombia es la más baja en 10 años


La cifra de homicidios en Colombia es la más baja en 10 años, con alrededor de 14.000 crímenes en 2013, una disminución de 9,12 % frente a 2012, informó este lunes el estatal Instituto de Medicina Legal.
“Durante 2013 fueron reportados 14.294 homicidios al Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses (INMLCF), con 1.433 casos menos (9,12 %) respecto al año anterior”, dijo esa entidad en su informe anual.

De esta manera, Colombia presenta su menor índice de homicidios en una década, según el instituto, pues “de 52,4 casos por cada 100.000 habitantes en 2003, bajó a 30,3 casos en 2013, para una reducción relativa de 22,1 casos por cada 100.000 habitantes”, añadió el reporte.
Sin embargo, la entidad no pudo establecer las causas de la totalidad de estos crímenes en Colombia, un país de casi 48 millones de habitantes.
El organismo esclareció las circunstancias de los hechos en tan sólo 3.780 casos. La “violencia interpersonal (impulsiva)” se ubica como la primera causa de los asesinatos, con 48,28 %.
En segundo lugar aparece la “violencia sociopolítica”, con 18,25%, seguida de la “violencia económica”, con 10,56 % de los casos.
Colombia vive desde hace 50 años un conflicto armado en el que han participado guerrillas de izquierda, paramilitares de derecha, fuerzas militares y bandas narcotraficantes, que ha dejado por lo menos seis millones de personas afectadas, según la ONU.
Aparte de las cifras de lesiones fatales, el estudio “Forensis 2013″ evidenció el aumento de riñas respecto al año anterior, con 158.798 casos, frente a los 155.507 de 2012.
“Los colombianos, lamentablemente, nos estamos agrediendo más… (…) somos mucho más intolerantes y aunque estos casos no son fatales estas lesiones dejan en su mayoría consecuencias más graves”, dijo a la prensa Carlos Valdés, director del instituto forense.
A pesar de la disminución en los homicidios, la tasa colombiana en la materia, de 30,3 casos por 100.000 habitantes, sigue estando entre las más altas del mundo, frente al promedio global de 6,2 víctimas por cada 100.000 habitantes, de acuerdo con cifras de la oficina de la ONU para la Droga y el Delito.